El acolchado (o mulch en inglés) es una práctica muy beneficiosa en jardinería: protege el sustrato de los rayos del sol, mantiene la humedad, calienta el suelo y evita la aparición de malas hierbas. Quizá no es tan habitual en huertos urbanos pero ya te avanzo que vale la pena (y mucho) usarlo también en tus macetas.
¿Qué es exactamente el acolchado o mulch?
El acolchado o mulch es una capa de un material orgánico o inorgánico que se extiende sobre la superficie de la tierra del huerto o el jardín. Al final, esta capa trata de imitar lo que sucede en la naturaleza y puedes observar paseando por el bosque. Bajo los árboles, no hay tierra desnuda sino una capa de materiales orgánicos formada por hojas muertas, ramitas, etc. Toda esta materia orgánica se va descomponiendo gracias a la acción de los microorganismos que viven en el suelo, transformándose en humus.
Podemos recrear este proceso natural para beneficiarnos de todas sus virtudes. Para ello, puedes utilizar distintos materiales: el más habitual en huertos de autoconsumo es la paja, pero también te servirán la corteza de pino, las hojas secas, los restos de poda, la arpillera, trozos de cartón, tapones de corcho, bolitas de arcilla, etc.
También se puede utilizar materiales no orgánicos para acolchar. ¿Has visto alguna vez un huerto con la tierra que rodea los cultivos cubierta de plástico negro? ¿O una zona ajardinada o un talud en el que han puesto un tejido plastificado tipo malla? Pues ese material plástico y tan poco respetuoso con el medio ambiente, también recibe el nombre de acolchado.
¿Qué beneficios tiene el mulch o acolchado en el huerto?
La primera vez que oí hablar del acolchado fue cuando se puso de moda el sistema de las parades en crestall. Este diseño se utiliza muchísimo en huertos escolares y de autoconsumo. Su promotor, un señor mallorquín, recomendaba el uso de paja como material de acolchado para conseguir todas estas ventajas:
- Proteger la tierra del huerto de los rayos del sol
- Mantener la humedad de la tierra durante más tiempo
- Calentar la tierra en invierno
- Mantener el sustrato esponjoso, evitando que se apelmace
- Evitar la aparición de malas hierbas
- Aportar materia orgánica al suelo al descomponerse
- Evitar la erosión
De todos estos beneficios, te detallo cuáles son, en mi opinión, los que pueden ser más interesantes para tu macetohuerto.
El acolchado para evitar la evaporación del sustrato en verano
Si tienes un huerto en macetas, sabes perfectamente lo que es regar en verano y que al día siguiente la tierra esté totalmente seca, ¿verdad? Pues una buena capa de acolchado orgánico nos ayuda a evitar la evaporación y por tanto, a mantener durante más tiempo la humedad del sustrato.
Esto no quiere decir que vayas a ahorrarte regar a diario, porque eso depende mucho del tamaño de la maceta, de la cantidad de plantas que tienes en ella y del calor que está haciendo. Pero valorándolo en general, la diferencia se nota, y mucho.
Calentar el suelo del huerto en invierno
En invierno, el acolchado calienta el suelo como si fuese una manta, protegiendo las raíces del frío. Su uso es muy interesante en zonas con inviernos rigurosos, o si hay riesgo de heladas o nevadas puntuales. En esta situación, el grosor de la capa puede ser algo más grande que en el huerto de verano.
Evitar la aparición de adventicias o malas hierbas
Si una semilla germina pero no recibe los rayos del sol, acaba muriendo. Y aunque no es habitual tener malas hierbas en el macetohuerto por cultivar en sustratos comerciales, sí es posible que con el tiempo, aparezcan algunas. Las semillas pueden haber llegado volando, o haberlas introducido tú mismo sin querer al usar estiércol, compost u otros materiales.
En jardines y huertos en el suelo, las malas hierbas son el día a día de cualquier hortelano. Y para ellos, el acolchado es la solución para evitar el trabajo de desherbar. Otra cosa es que para ello utilicen herbicidas químicos o plásticos para cubrir el suelo.
¿Qué materiales utilizar para el acolchado?
Respuesta rápida: el mejor acolchado para el huerto es el que te sea más fácil y barato de conseguir. Evidentemente, hay acolchados más bonitos que otros, pero por favor: que la cuestión estética no te impida disfrutar de sus beneficios.
- Paja – Es el acolchado más utilizado en huertos orgánicos. Sirve para crear una capa de entre 5 y 7 cm alrededor de las plantas. Riega justo después de instalarlo para que se asiente y no salga volando.
- Heno – Una buena opción si dispones de pocas macetas. Puedes comprar heno en en la sección de mascotas de cualquier supermercado. Procede igual que con la paja, regando después de colocarlo.
- Corteza de pino – Puedes encontrarla en cualquier centro de jardinería, con la ventaja de que es muy duradera porque se descompone muy lentamente.
- Acículas de pino (pinocha, pinaza) – Déjalas secar bien antes de añadirlas como mulch o acolchado. Tienden a acidificar ligeramente el suelo, así que utilizalas preferentemente en las fresas, las tomateras y en los frutos rojos.
- Tapones de corcho – Fáciles de conseguir si tienes amigos en el sector de la restauración. También tardan mucho en degradarse.
- Papel o cartón – De los que vamos sobrados en la ciudad. El papel de periódico puede utilizarse sin problemas porque las tintas no contienen metales pesados. Si usas cartón, que sea preferentemente de color marrón, o elimina previamente cualquier plástico o impresión. Corta a tiras los rollos de cartón del papel higiénico o de cocina, y el de las cajas de huevos.
- Hojas secas y restos de poda – Aprovecha las amistades que tienen jardín y ofrécete a recoger sus hojas secas o recortes de césped. Puedes utilizar los restos como acolchado o para elaborar compost. Ojito con el césped: deja que se seque antes de usarlo o podría pudrirse con la humedad.
- Piedras, grava, arlita o puzolana – Muy útiles para plantas que necesitan humedad constante y temperaturas del suelo elevadas. Evitará la aparición de hierbas adventicias y calentará el suelo.
Fijo que se te ocurren otros residuos orgánicos que tienes a tu alcance y que seguro, seguro, te van a funcionar. Me han contado experiencias que fliparias. Lo importante es que el material de acolchado para el huerto esté seco para evitar pudriciones en la superficie de la tierra, malos olores, mosquitas, etc…
A mi me está funcionando muy bien la paja, y no me costó muy cara (4,90 € la paca). El único problema que veo es el almacenaje: el tamaño del fardo es e-nor-me. De hecho, 2023 ha sido mi tercer verano acolchando y no he gastado ni un tercio…
Recientemente han aparecido plásticos biodegradables y tejidos a base de fibras naturales como el cáñamo o el lino. No los he probado, así que no puedo darte mi opinión.
¿Cómo poner el acolchado en el huerto?
- Reparte el material de acolchado encima del sustrato, formando una capa de entre 5-7 cms alrededor de las plantas. No lo mezcles con el sustrato: tiene que quedar encima de él.
- Separa ligeramente el material del tronco de los árboles o del tallo de las plantas para que el aire circule. Así evitarás problemas de pudrición.
- Para regar, basta con echar el agua por encima. Te recomiendo que el primer riego sea generoso, para que puedas comprobar qué tanto de agua puede llegar a absorber el material que estás utilizando. Normalmente, los materiales de acolchado son algo porosos, así que parte del agua de riego se «pierde» humedeciendo el material. Esa agua no llegará a las raíces de tus plantas, así que ese riego generoso te permitirá ajustar mejor la cantidad de agua que necesitas a partir de ahora.
- Si durante el cultivo utilizas algún tipo de abono o fertilizante sólido, te recomiendo que apartes el acolchado para depositarlo sobre el sustrato. La paja, por ejemplo, se compacta de tal manera que si tienes que levantarla, se convierte en una especie de tapa relativamente fácil de mover.
¿En qué época del año se utiliza el acolchado?
Pues eso depende del tipo de planta, de tu clima y de la pluviometría de tu zona. Me explico, porque no es lo mismo utilizarlo donde vivo yo (zona mediterránea, con veranos muy calurosos e inviernos suaves) que en el norte, donde llueve mucho más.
Frutales y arbustos de frutos rojos – Los tengo acolchados todo el año, e incluso añado una capa de mayor grosor si durante el invierno hace más frío de lo habitual. Llevan en corteza de pino más de 5 años y no he tenido que volver a añadir más desde entonces. No creo que en una zona más lluviosa provoque ningún problema siempre y cuando uses un material poroso.
Las fresas mantienen su acolchado de paja durante todo el año aunque en el pasado utilicé tapones de corcho con buenos resultados. Además de mantener la humedad, evita que las fresas se pudran en contacto con el suelo.
Hortalizas de verano – Personalmente, es la época del año en la que considero más útil el acolchado en el huerto por su capacidad de evitar la evaporación. Pero mucho ojito: la mayoría de solanáceas (tomates, pimientos, berenjenas) necesitan que la tierra se caliente en primavera para empezar a crecer. En el caso de los pimientos (que ya sabes que son los que tardan más en pegar el estirón), no añadas el acolchado hasta entonces. A las cucurbitáceas y a las judías también les viene de perlas, así como a cualquier otra planta ornamental que esté sufriendo los calores del verano.
He probado casi todos los acolchados, incluído el de papel. Todos me han funcionado bien aunque por razones evidentes, no voy a probar ninguno más hasta que gaste la bala de paja que compré hace años.
Hortalizas de invierno – Aquí es donde puedes tener problemas si vives en zonas lluviosas, porque si, el acolchado calentará la tierra pero también conservará la humedad y eso atraerá a más caracoles y babosas.
No lo utilices bajo ningún concepto en hortalizas de raíz como ajos, cebollas, zanahorias o remolachas: puede acabar provocando la aparición de hongos o pudriendo las raíces.
Si en cambio vives en una zona como la mía, donde las lluvias brillan por su ausencia, ¡adelante! Esto del acolchado o mulch no es una ciencia exacta, y como habrás visto, depende de muchos factores. De todos modos, creo que en verano nos puede ser muy útil a todos teniendo en cuenta el cambio climático y la sequía que nos acecha.
¿Tú también utilizas acolchado en el huerto? ¿Qué tal la experiencia?
Dudas frecuentes sobre el acolchado en el huerto
Ese es un problema habitual con la paja. Yo lo he solucionado regando la paja que voy a utilizar un poco antes de colocarla. Así, evito que germinen y enraícen en el sustrato de las macetas. Alguna se escapa, pero es fácil arrancarla en cuanto empieza a crecer.
Las fibras de la paja en concreto, se entrelazan entre sí rápidamente. Pero para ello es importante que riegues generosamente justo después de colocarla. Alguna brizna puede escaparse, eso sí, pero no te vas a quedar sin paja a la que sople un poco.
Otra opción que tienes es usar corteza de pino o un tejido natural biodegradable que puedes clavar en el sustrato de las macetas.
2 respuestas
Buenas tardes,
Me encanta el articulo, soy una apasionada de las plantas y el huerto, soy de Madrid y yo normalmente cuando no compro la tierra en sacos en mi zona una empresa que vende buena tierra en sacas grandes y buen sustrato tanto para el huerto como para las plantas, lo recomiendo por si otro/a apasionado de las plantas esta interesado. Muchas gracias por tu trabajo. Un saludo.
Gracias por tu aportación, Amalia. ¡Saludos!