Uno de los grandes interrogantes que te formulas cuando empiezas el huerto es acerca de qué tipo de abono es mejor utilizar. ¿Acaso hay alguno mejor que otro o todos sirven por igual? ¿Podré aplicarlo en todas las plantas? ¿Hay alguno que pueda utilizar y así luego, olvidarme?
Te acercas a cualquier vivero y la oferta aún te despista más. ¿Porqué habrá tantas opciones?
Lo más habitual es decantarse por un abono a base de estiércol, que no es otra cosa que heces de origen animal. Algo a lo que los urbanitas le tememos por distintos motivos:
- Somos incapaces de ignorar su origen y eso nos provoca aversión.
- Creemos que olerá fatal, atraerá moscas y que el vecino repelente de arriba nos preguntará qué bicho se nos ha muerto en el balcón.
- Encontramos otras opciones a base de bolitas o líquidos que no huelen mal. O por lo menos eso nos parece cuando los vemos en los comercios.
Lo primero sería aclarar estas suposiciones: un abono a base de estiércol que podamos comprar envasado, ha pasado previamente por un proceso de compostaje. Por ello, ni huele mal, ni atrae moscas y en muchas ocasiones no tiene ni la forma del excremento que es. Hablando en plata: al abrir la bolsa no vamos a encontrarnos con un montón de boñigas, sino algo más parecido a una «tierra buena». Oscura, y con un olor más parecido a tierra de bosque que al excremento que fué.
¿Qué opciones de estiercol tenemos?
Los abonos que se encuentran habitualmente en los comercios especializados son los de caballo, el de vaca, de oveja, y el guano (excrementos de aves marinas y murciélagos que podemos adquirir en polvo o en formato líquido).
Cada fabricante tiene su formulación: a veces son una mezcla de estiércol de distintos animales, otros llevan restos de paja de los establos, o están disponibles en distintos formatos. Lo más importante es que sigáis las dosis de uso que se recomiendan en la bolsa, puesto que el chute de nutrientes puede variar considerablemente de uno a otro
Por descontado, hay una opción B que consiste en conseguir estos estiércoles «directamente del productor». En mi zona es muy habitual acercarse a un picadero y conseguir de manera gratuita todo el estiércol que necesitas. El propietario te lo regala encantado, ¡todo el que quieras! No siempre pueden deshacerse de él sin que les suponga un coste económico, así que no os dé vergüenza pedirlo.
El problema: en muchas ocasiones este estiércol es fresco, y no ha pasado por un proceso de compostaje apropiado. Esto se traduce en casi todos los puntos de la lista que mencionaba antes: mala olor, moscas (¡y gusanos!), y especialmente una temperatura que puede ser perjudicial para nuestras plantas. Si tenéis la posibilidad de que os lo regalen, preguntad siempre qué montón de estiércol es el más viejo: os curaréis en salud.
La gallinaza
Quizá vuestra opción B consista en conseguir estiércol de gallina, palomas o otras aves. Por lo que cuentan en Infojardín, este es el abono considerado «más fuerte», y por ello se recomiendo usarlo con precaución. Personalmente debo deciros que no lo he probado nunca, por lo que no puedo hablaros de su uso en primera persona. En cualquier caso, os dejo algunos enlaces por si queréis ampliar información:
Y también este video de La huertina de Toni sobre cómo elaborar purín de gallinaza (o lo que es lo mismo, cómo «rebajarlo» para hacer un abono líquido para nuestro huerto):
¿Qué estiércol es mejor?
Uff, la pregunta del millón y que daría pie a un largo debate. Los primeros años estuve usando de caballo, ya que era el que me resultaba más fácil encontrar en cualquier vivero. Después estuve utilizando uno que viene mezclado de vaca y oveja que también me fué bien. Pero finalmente dí con el humus de lombriz y reconozco que es mi preferido.
Quizá lo mejor de todo es saber que todos van bien (o lo que es lo mismo: que ninguno va mal), y que solo la experimentación os puede llevar a sacar vuestras propias conclusiones. Este año tengo uno de vaca para probar del que me mandaron una muestra. Veremos qué tal me va, ya os contaré!
El estiércol en el huerto
No olvidéis que el uso de estiércol en el huerto os va a ayudar a mejorar la textura de la tierra. Y en el caso de las macetas, que con él ganaréis volumen para llenarlas hasta arriba de todo.
Además, la aportación de abono debe realizarse siempre antes de iniciar los cultivos, tal y como explicamos el año pasado en esta entrada. Espero que os sirva de ayuda.
¡Saludos!
11 respuestas
Hola Picarona, nos ha parecido interesante, al hilo de este post, aportar un poquito más de luz en referencia a la pregunta del millón, ¿Qué estiércol es mejor?. En nuestro perfil de facebook hemos colgado una tabla (aquí no se puede) de lo que aporta cada estiércol en cuanto a N, P,K se refiere. Considero que hay unos más adecuados para la producción hortícola común que se puede dar en macetohuertos y huerto urbanos. En estas producciones las necesidades nutricionales de los cultivos para NPK son aproximadamente 2,1,2 en peso. Por tanto, el estiércol que más se acerca a estas necesidades son el purín de bovino y el estiércol de caballo. Lógicamente dependerá también de cómo estén alimentándose estos animales. Por lo que considero recomiendas bien en ir probando y viendo qué le funciona mejor a cada uno.
Un saludo cordial
Camilo Soler .
Ing. Técnico Agrícola
CEO de EcoBrotes.
Muchas gracias por tu aportación, Camilo. ¡Muy interesante!
Un placer aportar a tu fantástico blog. Saludos. Camilo
¡Buenas noches a todos! Por mi parte soy un gran defensor del estiércol, sobre todo cuando se busca aumentar el porcentaje de materia orgánica (básicamente mejorar el suelo) más que por la aportación de nutrientes (NPK), donde rara vez se llega a superar el 2%. En algunas tierras, sobre todo las que me muevo yo, distan mucho de llegar al 2% de M.O. recomendado por los grandes autores y expertos en edafología agrícola, y el estiércol o purín se suele usar en grandes cantidades, sobre todo por el precio.
¿Qué estiércol es mejor? Quizá se reformula la cuestión con un: ¿qué vas a cultivar? Sobre todo, a niveles de huerto o cultivo en macetas es interesante también mirar el pH y la conductividad eléctrica que añades a la tierra (sumando después la del agua). El estiércol de gallina, considerado como «fuerte», lo es en sí porque tiene un alto porcentaje de MO (superior al de caballo, vacuno, porcino, etc), pero también aporta una conductividad eléctrica altísima, a valorar, sobre todo si se riega con aguas de mala calidad (salinas) o se complementa la nutrición con más abonos. El resultado puede ser un bloqueo del suelo, aparición de quemaduras en las hojas e incremento de riego y abonado buscando solución al problema.
Si me tengo que mojar por un estiércol diría, sin duda, que vacuno o de caballo. Simplemente porque son más equilibrados.
¡Saludos desde Agromática! 🙂
Como siempre, un placer leer la opinión de un profesional. ¡Gracias por compartirla!
Me ha encantado la forma de hacer humus de lombriz .
soy principiante y me has dado muy buena informacion
Me alegra haber sido de utilidad, Angel.
Saludos!
Les comento. Lo que ago recojo todas las sobrantes de la huerta hojas. Lechugas que se creen por el sol. Calabaza es. Todo lo K no se puede consumir. Lo pongo en un lugar húmedo y por encima lo tapó con estiércol de caballo. Y así boi cada semana le pongo más y lo tapó de nuevo. Me a salido una mezcla de humus y tierra.pues se las puse a los tomates removiendo un poco la tierra al pie de la pl A n te y resulta que el tallo se a puesto grueso y me a dado unos tomates más grandes . Estoy esperando. Cortar el primero y ver la calidad . Otra c o sa gracias a Tony le he copiado algo
Gracias por tu aportación, Juanca!
Saludos
He encontrado un vertedero de estiércol que tiene mas de veinte años. Alguien me puede servir si este es bueno para mi huerto pues dicho estiércol es de oveja.
Malo no va a ser. Yo lo aprovecharia.